El Hospital General Universitario Doctor Balmis ha puesto en marcha el proyecto CardioControl, con la colaboración de la compañía farmacéutica Daiichi Sankyo, un programa piloto para la monitorización personalizada de pacientes de la Unidad de Rehabilitación Cardiaca.
Durante el primer año, se implementará en el centro alicantino junto a otros dos hospitales a nivel nacional y se prevé que participen hasta 200 pacientes en esta primera fase. Así, el proyecto cumplirá con tres objetivos, mejorar los resultados de salud, el seguimiento, la calidad asistencial y el acompañamiento de los pacientes en rehabilitación cardiaca; fomentar la adherencia a estos programas y promover la innovación en la atención sanitaria.
La rehabilitación cardiaca está recomendada como parte del tratamiento de los pacientes con enfermedad cardiovascular, ya que puede reducir el riesgo de un nuevo infarto, controlar la sintomatología, estabilizar o revertir los procesos ateroscleróticos, limitar los efectos psicológicos, mejorar el estatus psicosocial y laboral de los pacientes y ayudar a mantener la adherencia al tratamiento óptimo a largo plazo por medio de la educación del paciente.
A pesar de la evidencia disponible, según el estudio EUROASPIRE V, solo el 34% de los pacientes cumplen los objetivos de ejercicio físico tras un evento cardiovascular. Además, la participación y adherencia de las mujeres en programas de rehabilitación cardiaca es un 30% inferior a la de los varones.
Atención personalizada
A través de esta plataforma digital se pretende contribuir a mejorar la adherencia de los pacientes a estos programas, con un seguimiento más personalizado, y facilitar la toma de decisiones de los profesionales de estas unidades. Los pacientes han de descargar la aplicación en su móvil, donde pueden volcar sus constantes vitales, lo que evita desplazamientos al hospital. Cada paciente cuenta con un plan de ejercicios y pautas de alimentación personalizadas con contenido digital y objetivos que le motivan y le ayudan a mantener las recomendaciones de su médico.
El proyecto va a permitir que los profesionales sanitarios accedan a la información de sus pacientes de forma más ágil, mediante la actualización periódica de las métricas de salud que realizan los pacientes, con el objetivo de evaluar su evolución y facilitar la toma de decisiones.
A nivel clínico, la aplicación permite una rápida y fácil integración en las unidades de rehabilitación cardíaca, incluyendo la historia clínica del paciente. Asimismo, permite lanzar cuestionarios que miden aspectos relevantes de la salud de los pacientes como el perfil lipídico, controles de glucemia y peso, el estado anímico y mental, la actividad física que realiza o la sintomatología, e incluir datos como la frecuencia de pulso o la tensión arterial
El sistema utiliza la tecnología de Vitalera APP, una solución flexible y adaptable, que se descarga en el móvil del paciente, para la atención remota de calidad. Esta tecnología está transformando el acceso global a la atención médica al aprovechar un sistema automatizado de telemonitorización.
La doctora Miriam Sandín Rollán, cardióloga del Hospital Doctor Balmis, ha explicado que “este proyecto que arranca en nuestro hospital demuestra el potencial que tiene la telemedicina y las nuevas herramientas para el seguimiento y monitorización de pacientes. En el caso de patologías concretas, como son las enfermedades cardiovasculares, donde una monitorización y un seguimiento estrechos son clave, la telemedicina permite realizar una atención médica a distancia más personalizada, facilita la promoción de hábitos de vida cardiosaludables y la participación activa de los pacientes. CardioControl es un programa muy sencillo, que permite al paciente reportar datos a su médico en tiempo real, responsabilizándose de su autocuidado de una forma activa y consciente”.
300 pacientes al año
La Unidad de Rehabilitación Cardíaca del Hospital General Universitario Doctor Balmis, adscrita a los Servicios de Cardiología y Rehabilitación, atiende a una media de 300 pacientes al año de dos perfiles principales, pacientes con insuficiencia cardíaca y con enfermedad coronaria.
El dispositivo cuenta con un enfoque multidisciplinar, ya que está integrado por personal médico, de enfermería y fisioterapia. Sus principales beneficios son la mejora de la calidad de vida y el aumento de la supervivencia de los pacientes, la reducción del riesgo de reingresos y su coste-eficacia.